Tal día como hoy, hace miles de años, los celtas celebraban esta noche, pero lo curioso es que no se emborrachaban, como suele pasar hoy, sino que se lo tomaban muy en serio, y sus sacerdotes dedicaban la noche a Samhain, el caballero de la muerte. En esta espirituosa noche, se encendían grandes fogatas, y increíble, pero algunos humanos, a veces, llegaban a ser sacrificados para, según pensaban ellos, ahuyentar a las brujas y a los espíritus malignos.
Llegaron los romanos, y tomando las mismas costumbres que los dominios celtas, incorporaron su fiesta de la diosa de los árboles frutales a ese día, así que la manzana se convirtió en un fruta privilegiada y querida por todos. Pero claro, no podía faltar la Iglesia, y se opuso a esta festividad. Tenía que buscar darle el gusto a todos, y así fue como convirtieron la festividad en cristiana e hicieron del día 1 de noviembre, el Día de Todos los Santos, que todos tenemos en nuestro calendario.
Es cierto, que cada vez más sobre todo los más pequeños se visten de brujas, diablos, y así hacen más creible sus cuentos encantados. Pero lo que está claro, es que Halloween es una de las fechas más importantes del calendario festivo estadounidense y canadiense. Y, ¿por qué las brujas van montadas en escobas mágicas y vuelan?, o por lo menos esa es la imagen que todos tenemos. Pues, esta imagen fue inventada por un pueblo puritano de Estados Unidos, donde a alguien se le ocurrió que las brujas se escapaban montadas en sus escobas mágicas.
Así que, todos a disfrazarse en esta noche encantada por la magia.
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